Retos para la conservación…

Retos para la conservación de nuestros bosques tropicales

Por: Rebeca Cabezas y Luis Trevejo

Desde la emisión en 2013 del Quinto Informe de Evaluación (AR5) del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés), la comunidad científica ha podido afirmar que la influencia humana ha sido la principal causa del calentamiento global observado desde mediados del siglo XX , debido al incremento sustancial de los gases de efecto invernadero, siendo el principal el dióxido de carbono (CO2). Y, luego de veinte años de negociaciones, la realización en 2015 de la Vigésimo Segunda Conferencia de las Partes en Paris (COP21) COP representó la consolidación de todos los esfuerzos de las diferentes naciones partes y organizaciones de la sociedad civil a nivel mundial para la lucha contra el cambio climático, suscribiendo en el Acuerdo de París el compromiso de no elevar en más de 2° C la temperatura global.

Dos años después, Estados Unidos, la segunda nación en el mundo con mayores emisiones de CO2 (15%) , rompe el pacto firmado por 195 países contra el cambio climático, retirándose del Acuerdo de París. El presidente de los Estados Unidos no solo ha mostrado su renuencia al conocimiento científico, sino que ha dejado al mundo con pocas opciones de alcanzar el compromiso climático planetario.

En una coyuntura de tal magnitud, las acciones a tomar para la preservación de medios de vida y ecosistemas, como los bosques tropicales, que contribuyen significativamente a reducir los impactos del clima y a regular la temperatura mundial, tienen que intensificarse si queremos sobrevivir al futuro.

Los bosques tropicales son bien llamados los “pulmones del mundo”, por el papel fundamental que juegan en la absorción del CO2 y la producción del oxígeno (O2) que los seres vivos necesitamos para respirar y, hoy más que nunca, para la mitigación del cambio climático. Según la FAO, los bosques y en especial los tropicales, tienen la capacidad de atrapar un billón de toneladas de carbono; y que, disminuyendo la deforestación, aumentando la cobertura boscosa y desarrollando iniciativas agroforestales, podríamos reducir al 15% las emisiones de carbono provenientes de combustibles fósiles de los próximos 50 años.

De igual manera, la importancia de los bosques tropicales también puede verse en el ciclo hidrológico, donde estos adicionan agua en la atmósfera a través del proceso de transpiración e incrementan el grado de humedad, que a su vez propicia la formación de nubes de lluvia. Esto se hace más perceptible cuando se verifica la disminución del grado de humedad en las zonas del bosque donde se tala, e incluso, puede causar sequías en el extremo opuesto en el que se encuentre. Esto se explica por el rol de los bosques tropicales en los patrones de clima global, siendo posible que una completa deforestación de la Amazonía pueda reducir la lluvia en el Pacífico Noroeste en 20% y
en 50% en Sierra Nevada, generando un impacto en la agricultura de norteamericana y serias consecuencias en el suministro de sus alimentos .

El lado poco amable

A pesar de todos estos beneficios, directos e indirectos, la deforestación de los bosques tropicales ha estado avanzando muy rápidamente. El 2016, la revista Science reveló que el 80% de los bosques húmedos se habían conservado; sin embargo, la pérdida de bosques amazónicos en el Perú, del 2000 al 2014, ha sido de 1´315,674.47 hectáreas . En un ámbito regional, Loreto alcanzó al 2014 una deforestación anual de 1´238,249.16 hectáreas, siendo en la provincia de Maynas donde se observa una mayor deforestación, 250,281.99 hectáreas. Frente a este último dato, la Dirección Ejecutiva Forestal y de Fauna Silvestre de la Autoridad Regional del Ambiente del Gobierno Regional de Loreto, advirtió una serie de impactos sobre los ciclos naturales que sostienen los medios de vida de las poblaciones, básicamente la reducción de cobertura de bosques, señalando que la productividad de los suelos y la biodiversidad, así como la seguridad física de las personas y sus hábitos sociales se encontrarían amenazados .

Evolución de las pérdidas de bosque o deforestación del 2000 al 2014
Fuente: MINAM, 2015

Grandes esfuerzos

A pesar de ello, aun contamos con mucha gente involucrada, manifestándose y tomando acciones en favor de la preservación de los bosques tropicales, lo que se traduce en esfuerzos por la mitigación de los efectos del cambio climático, aun cuando esto represente hoy en día uno de los retos más difíciles de la humanidad.

Un ejemplo claro de esfuerzo global son los pueblos indígenas, grandes actores en un escenario climático, ya que aparte de ser los guardianes de la naturaleza, sus territorios contienen el 20% del carbono del planeta, representando así una oportunidad incomparable para una reducción significativa del cambio del clima, y quienes conscientes de ello, demandan a los líderes mundiales seguridad jurídica de sus territorios, el cese a la violencia contra sus líderes, el reconocimiento de su contribución a la mitigación del cambio climático, financiamiento climático y el consentimiento previo para iniciativas que alteren sus medios de vida.

Así también, se han creado fondos bilaterales y multilaterales, como el fondo verde para el clima, que aspira al año 2020 manejar una cartera de 100 mil millones de dólares para financiar acciones de adaptación y mitigación en todo el mundo. De igual manera, muchas organizaciones de cooperación internacional e incluso naciones de manera independiente vienen desarrollando proyectos de preservación de bosques tropicales, a través de organismos gubernamentales, como de organismos no gubernamentales (ONG). Al respecto, las expertas forestales Frances Seymour y Jonah Bush, señalan que el futuro y longevidad de la protección de los bosques tropicales dependerá en gran medida de una mayor inversión.

Lo simple

Frente a todo ello seguro te habrás preguntado ¿Cómo podemos contribuir las personas de a pie en la conservación de los bosques tropicales? Localmente, muchos de nuestros hábitos o patrones de consumo podrían influir favorablemente en la preservación de los bosques tropicales, por ejemplo:
– Imprime en papel reciclado y usa productos de este mismo material.
– No compres productos provenientes de tala ilegal.
– Toma café de zonas donde la producen bajo sombra (1 taza ayuda a conservar 4m2).
– Disminuye el uso de productos descartables.
– Cancela tus subscripciones vía correo postal (en EEUU se cortan 100 millones de árboles cada año por este servicio).
– Deja de imprimir estados de cuenta.
– Disminuye la compra de libros y préstalos.
– Come carne de res proveniente de lugares con prácticas amigables con el medio ambiente.
– Comparte tu amor por la naturaleza.

Para que podamos comprometernos con estas acciones, es fundamental que la población en general y tomadores de decisiones, nos sensibilicemos y tomemos conciencia del problema que acarrea la disminución de los bosques tropicales. Si bien las políticas de educación ambiental deben priorizarse en este sentido, también es imprescindible que la sociedad civil organizada como la comunidad de estudiantes, colegios públicos y las diferentes asociaciones, puedan empezar a manejar en sus agendas espacios para la sociabilización de información no solo sobre la preservación de bosques tropicales, sino un espacio para generar cambios de actitudes sobre el ambiente en el normal desarrollo de sus actividades. Desde el reciclaje y la reducción del uso del plástico hasta espacios que permitan el debate sobre los procesos de titulación de comunidades o de zonificación en la Amazonía.

Luego de leer este último párrafo podemos afirmar que, como nosotros, muchos podrían considerar que existe una mayor responsabilidad para actuar o manifestarse en cualquier sentido, de parte de aquellos que conocen un poco, del complejo concepto que es el ambiente; por ello mismo, es casi un deber ser los primeros en actuar.

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1 Informe de Síntesis-IPCC Quinto Informe
2 De acuerdo a la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés) de los Estados Unidos de Norteamérica, las emisiones actualizadas al 2014 señalan como principal emisor con el 30% a China, seguido de Estados Unidos con el 15%, a veintiocho países de la Unión Europea con 9%
3 Medvigy, David, Robert L. Walko, Martin J. Otte, Roni Avissar, 2013: Simulated Changes in Northwest U.S. Climate in Response to Amazon Deforestation. J. Climate, 26, 9115–9136.
4 MINAM, 2015: Cuantificación y Análisis de la Deforestación en la Amazonía Peruana en el Periodo 2010-2014
5 INFORME Nº 012-2016-GRL-GGR-ARA-DEFFS-SDGIFFS/GPGG del 17 de mayo de 2016.

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